Como comenté anteriormente, he decidido empezar cinefilamente el año 2009 viendo "Alien, El Octavo Pasajero", una de las miles de espinitas clavadas que tengo, lo que me ha llevado a plantearme el hacer un repaso a toda la saga.
Empezando por el principio, me dispongo a continuación a comentar esta obra maestra indiscutible de la ciencia ficción cinematográfica, alabada por el 99% de los cinéfilos del mundo.
"Alien" cuenta la historia futurista de siete tripulantes de diversa índole y personalidad de una nave comercial que recibe una llamada de socorro desde un pequeño planeta cercano. Obligados por la ley, se disponen a prestar socorro a los supervivientes de lo que hubiera ocurrido en el planeta, donde se encontraran con una extraña forma de vida.
Con un reparto encabezado por una guapísima y joven Sigourney Weaver y un John Hurt estupendo, lo primero que llama la atención de la cinta, dejando en un segundo plano lo marcado de la personalidad de los tripulantes, son los decorados y el diseño artístico en general. Unos decorados tan originales y auténticos como los que se construyeran para "Star Wars" o "2001". Auténticos laberintos de pasillos llenos de tuberías que rezuman vapor, lucecitas parpadeantes, oscuridad y paredes estrechas que acrecentan la angustia y el agobio de los personajes y el espectador a medida que avanza la película.
Entre los preciosistas escenarios, a la vez que oscuros, frutos de una estupenda imaginación y un buen curro de construcción, se somete una y otra vez a los personajes a a situaciones límite, enfrentándolos a lo desconocido, a algo que no ven, mientras el espectador comienza a sentir agobio y terror, entre algún que otro susto. Personajes muy diversos, con alguna que otra sorpresa incluida, hacen muy amena y entretenida la trama, gracias a sus marcadas personalidades que aunque arquetípicas hoy en día, por aquella época fueron lo suficientemente sorprendentes como para convertir la película en la obra de culto que es.
La cámara se mueve con contundente habilidad por los pasillos de la Nostromo entre oscuridad y destellos de luz de manera que nunca sepas lo que deparará a la vuelta de la esquina.
Escenas memorables, destacando entre todas la protagonizada por John Hurt y la criatura que sale de su pecho, pero sin desprestigiar la apertura de la vaina en el planeta desconocido, la pelea con el personaje sorpresa y la consiguiente conversación con el, el derramamiento de sangre de la criatura, o las protagonizadas por Ripley corriendo por los pasillos lanzallamas en mano con continuos destellos de luz.
Cada aparición del monstruo es memorable. Debido a la brevedad de estas, resulta increíble cada plano fugaz en que se muestra a la criatura en todo su esplendor, un tremendo diseño terrorífico a la vez que atractivo que lo convierten en icono de la ciencia ficción.
"Alien, el Octavo Pasajero" es una excelente película que mezcla el terror y la ansiedad con la ciencia ficción, fruto de una tremenda imaginación que hace degustar cada escenario, personaje y diseño, y con un guión muy sólido a la par que original e influyente para su época. Referencia indiscutible para la ciencia ficción de nuestros días y una clase magistral de dirección angustiosa.
Más información: IMDB Filmaffinity
Una primera entrega de la saga que continuaría James Cameron manteniendo el nivel de forma muy digna.
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