El guionista de las excelentes "Babel" o "21 Gramos" hace unos meses se decidió a dirigir el mismo otro de sus profundos guiones para evitar depender de las riendas de Iñárritu, y ya de paso, probarse a si mismo.
La que nos ocupa es dicha película, para la cual, han reclutado a la siempre genial Charlize Theron y a una Kim Basinger bastante mayorcita, a las que se suman algunos secundarios más o menos conocidos, quienes cumplen con su cometido de forma notable.
Tal y como nos tiene acostumbrados, la cinta cuenta tres historias diferentes que en un principio no guardan ninguna relación, y entre las cuales es normal que nos sintamos bastante perdidos: saltos en el tiempo, cortes, diálogos naturales y escasos que se ahorran explicaciones... Pero que poco a poco dejan entrever la relación entre ellas.
Unos protagonistas cuyas vidas son extremadamente pesarosas debido a sus sufrimientos del pasado se dan a conocer desde el inicio de la película, la cual desarrolla con un ritmo árido y lento la personalidad de cada uno, dando poco a poco al espectador piezas para resolver el rompecabezas. Comenzando con un plano espectacular de una caravana ardiendo, se va contando que allí murió una mujer con su amante, dejando a dos familias medio-huérfanas, y haciendo sufrir a sus hijos. Por otra parte, una mujer se acuesta con cualquier hombre que se le cruce, lo cual no parece siquiera disfrutar, y en otra parte del mundo, un fumigador se estrella con su avión.
Unas premisas más simples y menos retorcidas que las de la excelente Babel, pero que carecen de la fuerza narrativa de las otras obras del autor compartidas con Iñárritu, y no sabría decir si es culpa del guión o de la dirección. Quizás las historias están demasiado trilladas a nuestros ojos, o antes de empezar a ver la película tenemos la premisa de lo que vamos a ver, y esto es, sufrimiento, depresión y frustración. Tal vez se deba a algunas cosas quizás previsibles del guión, es decir, sabemos que algo muy duro ha ocurrido, aunque no sabemos exactamente que, o por otra parte, se deba a la lentitud con la que parece funcionar todo, pero el caso es que, aunque la cinta me gustó, me sorprendió, y me transmitió lo suficiente, no dejó de parecerme algo carente de pasión narrativa.
Para que una historia así cuaje de la manera que cuajó Babel, es necesario que las imágenes impacten, que te desgarren la conciencia. Si, es cierto que "Lejos de la Tierra Quemada" cuanta con buenas interpretaciones, y de actrices no menos carismáticas, además de una excelentemente bella fotografía, pero le falta algo de chispa, o quizás originalidad o reinvención.
Pero ante todo, es una cinta que se deja ver, y a pesar de su lentitud, no se hace pesada, y se pasa volando gracias a la intriga que supone la, en apariencia inexistente relación de historias. Eso si, no la recomiendo, ni mucho menos, a quien este pasando una mala racha o se encuentre sensible emocionalmente. Hay escenas muy duras y difíciles de asimilar.
Arriaga ha demostrado que sabe dirigir, pero también, que forma un excelente equipo con Iñárritu, con quien ha conseguido dejar se a si mismo el listón demasiado alto.
Que si la resurrección de 
Entradas
